Wicked 2 llegó a las salas de cine con una energía imparable y un recibimiento que ya la coloca como uno de los estrenos más fuertes del año. La segunda parte del musical no solo cumplió con las expectativas: las rebasó al destrozar 14 récords de taquilla en su primer fin de semana, consolidándose como un fenómeno global que sigue creciendo.
El filme, que continúa la historia de Elphaba y Glinda, llegó acompañado de una mezcla poderosa de nostalgia, música icónica y una base de fans que llevaba años esperando esta secuela. Desde su primer día, Wicked 2 rompió marcas de preventa, asistencia global y recaudación durante funciones tempranas, convirtiéndose en un caso muy poco común incluso dentro de los grandes estrenos musicales.

Uno de los factores que más destacan es el impacto multigeneracional de la historia. Quienes crecieron con el musical original llenaron las salas, mientras que nuevas audiencias encontraron en esta entrega una versión moderna, visualmente espectacular y emocionalmente más intensa. Además, la campaña de marketing jugó un papel clave: teasers precisos, una banda sonora adelantada estratégicamente y un fuerte movimiento en redes sociales mantuvieron viva la conversación durante semanas.
Pero más allá de los números, lo que realmente está llamando la atención es la respuesta del público. Los comentarios coinciden en que la secuela elevó la apuesta visual, reforzó la química entre las protagonistas y añadió capas emocionales que enriquecen el universo de Oz. Muchos ya la consideran una de las adaptaciones musicales más sólidas de la última década.
Con este inicio demoledor, Wicked 2 no solo asegura una larga vida en cartelera, sino que confirma el poder que aún tiene el cine musical para mover audiencias masivas. Falta ver hasta dónde llega… pero todo indica que apenas está comenzando su vuelo.
Redacción: #TQHTeam

