Cada 23 de julio se celebra el Día Mundial de las Ballenas y los Delfines, una fecha dedicada a crear conciencia sobre la importancia de estos impresionantes mamíferos marinos, su papel en los ecosistemas y los peligros que enfrentan a causa de la actividad humana.
Las ballenas y los delfines no solo son símbolos de libertad y majestuosidad marina, también cumplen un papel fundamental en la salud de los océanos: ayudan a regular el equilibrio del ecosistema y contribuyen al ciclo del carbono. Sí, esos gigantes del mar tienen un impacto directo en el clima del planeta.
¿Por qué necesitan nuestra ayuda?
A pesar de su tamaño e inteligencia, estos animales enfrentan amenazas cada vez mayores:
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Caza ilegal
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Pesca incidental
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Contaminación por plásticos y derrames de petróleo
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Cambio climático que altera sus rutas migratorias
Además, el uso de sonares militares y el turismo irresponsable también afecta gravemente su bienestar, ya que interfiere con su sistema de comunicación y navegación.
¿Qué podemos hacer?
Aunque no vivas cerca del mar, tú también puedes contribuir a su protección.
Desde reducir el uso de plásticos, informarte sobre productos libres de crueldad marina, hasta apoyar organizaciones dedicadas a la conservación de cetáceos.
Cada pequeña acción suma cuando se trata de preservar la vida marina.
#TQHTeam