Cada 25 de mes se conmemora el Día Naranja, una iniciativa impulsada por la ONU desde 2008 que busca crear conciencia y prevenir la violencia contra mujeres y niñas en todo el mundo. No se trata de una simple fecha en el calendario, sino de un recordatorio mensual de que la igualdad y la seguridad no deberían ser excepciones, sino derechos garantizados.

El color naranja simboliza un futuro libre de violencia, lleno de esperanza y acción. Por eso, este día se invita a la sociedad a visibilizar el problema, promover la educación en igualdad, y apoyar a quienes han sido víctimas de cualquier forma de violencia de género: física, emocional, económica o simbólica.

En un contexto donde muchas veces la violencia está normalizada o invisibilizada, el Día Naranja es una oportunidad para hablar, escuchar, cuestionar y actuar. Desde campañas en redes hasta acciones comunitarias, cada gesto cuenta para romper el silencio y construir entornos más seguros.

Además de portar el color naranja como muestra de apoyo, es fundamental preguntarnos:
¿Qué estamos haciendo como sociedad para erradicar la violencia de género?
La solución empieza con la empatía, la educación y la acción colectiva.

Redacción: #TQHTeam