La innovación en móviles acaba de dar un salto importante con la presentación del Galaxy Z TriFold, el primer teléfono de Samsung con pantalla triple plegable. Este diseño —el resultado de más de una década de investigación en plegables— ofrece una experiencia versátil: cuando está cerrado, funciona como un smartphone convencional; al desplegarse por completo, revela una enorme pantalla de 10 pulgadas, ideal para productividad, contenido multimedia o trabajo en movimiento.

La pantalla interior es un panel Dynamic AMOLED 2X, con resolución QXGA+ y tasa de refresco adaptativa de hasta 120 Hz; cuando está plegado, la pantalla exterior de 6.5 pulgadas mantiene un acabado de alta gama. Además, Samsung reforzó el hardware: bisagras de titanio, estructura en aluminio reforzado, materiales resistentes y certificación IP48 contra agua/polvo.

En cuanto a potencia, el TriFold viene equipado con el chip Snapdragon 8 Elite, 16 GB de RAM, batería de 5,600 mAh (la más grande hasta ahora en un plegable de Samsung) y opciones de almacenamiento hasta 1 TB.

Su sistema, basado en Android 16 con One UI 8, permite optimizar multitareas —incluso con funciones de escritorio gracias a DeX integrado—, lo que transforma al equipo en una herramienta tan útil para trabajo como para entretenimiento.

El Galaxy Z TriFold representa un nuevo nivel de artesanía tecnológica: no es solo un “gadget”, sino una propuesta que busca redefinir lo que significa tener un dispositivo móvil y versátil. Su propuesta de diseño, potencia y funcionalidad lo coloca en la punta de lanza de la próxima generación de smartphones plegables, aunque aún habrá que esperar su llegada a todos los mercados para conocer su impacto real en usuarios comunes.

Redacción: #TQHTeam