Hoy, en el 13 de junio, se celebra el Día Mundial del Cáncer de Piel, una fecha dedicada a concientizar sobre uno de los tipos de cáncer más comunes en la población humana. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que hubo más de 1,5 millones de nuevos casos en 2020.
¿Qué es el cáncer de piel?
El cáncer de piel es una enfermedad en la cual se forman células malignas o cancerosas en los tejidos de la piel. La exposición excesiva a los rayos ultravioleta del sol es uno de los principales factores de riesgo para el cáncer de piel, aunque también pueden influir otros factores como antecedentes familiares, quemaduras solares graves, uso de camas de bronceado y ciertos trastornos genéticos.
Tipos de cáncer de piel
Existen varios tipos de cáncer de piel, siendo los más comunes el carcinoma de células basales, el carcinoma de células escamosas y el melanoma.
El carcinoma de células basales y el carcinoma de células escamosas suelen desarrollarse en áreas expuestas al sol y tienen una alta tasa de curación.
Por otro lado, el melanoma es un tipo más agresivo y potencialmente mortal que puede desarrollarse a partir de los lunares existentes o en áreas de piel normal.
Consejos para prevenir el cáncer de piel
1. La regla del ABCDE:
Es una herramienta para detectar signos de cáncer de piel. La “A” representa la asimetría de un lunar, la “B” se refiere a los bordes irregulares, la “C” indica un color variado, la “D” se relaciona con el diámetro y la “E” se refiere a la evolución del lunar.
La primera recomendación es tomar en consideración la regla del ABCDE para identificar posibles signos de cáncer de piel. Esta regla consiste en observar los siguientes aspectos de los lunares o lesiones cutáneas: asimetría, bordes irregulares, color variado, diámetro y evolución. Al prestar atención a estos indicadores, se puede detectar cualquier irregularidad que pueda ser motivo de preocupación y requerir una consulta médica.
2. Es recomendable someterse a chequeos médicos de manera regular:
En caso de ser diagnosticado con cáncer de piel, el tratamiento inicial suele ser la extirpación quirúrgica del tumor, lo cual suele ser suficiente para eliminarlo por completo. Sin embargo, si el cáncer no se detecta a tiempo, existe el riesgo de que las células cancerosas se diseminan a otras partes del cuerpo, lo que puede dar lugar a infecciones, ulceraciones, sangrado y otras complicaciones.
En etapas avanzadas, es posible que se requieran opciones de tratamiento más agresivas, como cirugía radical, radioterapia, medicamentos biológicos o quimioterapia. Es importante tener en cuenta que la efectividad de algunos tratamientos puede disminuir si el cáncer se ha propagado o se ha vuelto resistente. Después del tratamiento, es fundamental realizar exámenes periódicos de la piel y autoexámenes regulares para detectar cualquier cambio sospechoso.
3. Es importante utilizar protector solar durante todo el año cuando estemos al aire libre:
El protector solar debe aplicarse en las áreas expuestas de la piel, incluso en días nublados y fríos, ya que la radiación solar atraviesa las nubes. Al protegernos con protector solar, podemos prevenir el envejecimiento prematuro de la piel, la aparición de manchas y arrugas”, señaló Manzur.
Se recomienda el uso de protector solar con un factor de protección solar (FPS) de 30 o superior, especialmente durante las horas pico de radiación solar (generalmente entre las 10 a.m. y las 4 p.m.). Además, se debe evitar el uso de camas solares, ya que aumentan el riesgo de desarrollar cáncer de piel.
Es importante realizar revisiones regulares de la piel y tomar medidas para protegerse del sol, como usar protector solar, ropa protectora y evitar la exposición prolongada al sol.
FUENTE: infobae.com
